Ayer disfrutamos de una mañana de sábado diferente. Nuestra compañera María Miquel nos deleitó con un taller ligero y ameno, pero profundo y clarificador. Durante las 4 horas de taller, María nos ayudó a comprender por qué procastinamos, una de las nuevas epidemias de estos tiempos en la sociedad en general.
Terminamos con una relajación grupal, con auroras boreales y una muestra de sonoterapia a través de Koshis, para contribuir, no solo a liberar un poquito de distrés, sino para descubrir que si somos capaces de «meditar» durante unos minutos, sin darnos cuenta y que por tanto, podemos y seria saludable, aplicarlo en nuestro día a día como un hábito de salud y bienestar.
¡Gracias a todos los que nos acompañasteis con esa energía tan bonita que nos hizo encender fueguitos en el corazón!